Thursday, October 25, 2007

Mas sobre el futuro de la industria discografica a.k.a. el Efecto Radiohead

De 33 RPM a 160 Kbps: El futuro de la industria musical.

En una industria que en gran parte debe su existencia a la venta de CDs de sus artistas, la digitalización y las nuevas tecnologías representan una aventura por explorar, o el peor de los enemigos. Hoy en día, la música no sólo se vende por discos compactos, la introducción del archivo de música digital facilita (ademas de la piratería) la compra de música por vía electrónica sin tener que esperar a que el material esté disponible en tu país, o a que llegue si lo has pedido por paquetería. Pero hay algunos que ven más allá.

El gran experimento de Radiohead fue lanzado oficialmente el 10 de Octubre, fieles lectores del ahora llamado Songs for Absolution saben que ya se habló de aquello en este espacio. El nuevo "modelo de negocios" puso a temblar a toda la industria discográfica, ya que al distribuir material musical de esta forma se está eliminando a las disqueras como intermediario y las ganancias son directas para la banda. ¿Cuáles serán las consecuencias del ‘efecto Radiohead’? Por lo pronto, la más evidente dice que el flujo de dinero en la industria musical ya no es a través del disco compacto. Estos medios resultan meros instrumentos de promoción, y que las grandes ganancias se obtienen de las presentaciones en vivo de los artistas y la mercancía. Los Rolling Stones venden los mejores boletos para sus presentaciones en 150 libras. Por la misma razón, podemos ver a las disqueras invirtiendo fuertes sumas para convencer a grupos importantes ya retirados a que se reúnan: The Police vende sus entradas a 70 libras. The Smashing Pumpkins, The Stooges, Spice Girls. Todos están de vuelta para darle grandes ganancias a las disqueras. Tan solo una de las presentaciones de las Spice Girls en el O2 Arena de Londres les dará 1,500,000 de libras. Las Spice Girls tienen agendadas 17 noches.

La digitalización facilita que los discos puedan ser copiados y vendidos de forma pirata o incluso distribuidos gratuitamente por la Internet. Sin embargo, la experiencia de la música en vivo es algo que jamás podrá ser copiado. Si a eso le sumamos la nostalgia por los grupos ‘con los que crecimos’, pondremos mas atención a ver cuando visitan nuestro país los grupos reunidos que a los precios de los boletos. No importa que no vengan James Iha y D’Arcy, queremos escuchar 1979 de nuevo.

Después de todo, los que más pueden perder son los nuevos artistas. Radiohead da su disco al precio que quieras porque pueden costearlo. Maynard James Keenan de Tool se da la libertad de pagar la totalidad de costos de su nuevo proyecto Puscifer porque tiene el dinero para hacerlo. Las disqueras, al proponer costosas ofertas para mantener a sus artistas o reunirlos, están olvidando a las nuevas propuestas que sin grandes apoyos no pueden llegar al nivel de los grupos ya establecidos.

Sin embargo, Keenan sigue preocupado por este último asunto. En una carta enviada a los que se hayan registrado en el sitio de Puscifer, externa su preocupación por el estado actual de la comercialización musical:
This project for me is one part fun, one part learning experience. Trying to go it alone, without a label to convolute my efforts is very terrifying, chaotic, and challenging. But all in a very positive way. Many many dark corners and unknowns. It's liberating but still pretty damn scary. This is a very very expensive education.

I could very easily lose my ass on this whole thing. But it's sort of ok. I can afford a new ass.
anyway...

Lots of controversy flying about regarding downloading. Time to throw my 2 cents in. downloading wont effect me TOO much. But it will affect those bands right on the edge. bands who could use the hundred bucks to make it to the next town to play a show (gas and food aren't free. go figure). Or could use some cash to record a new record.

I'm one of the lucky ones (thanks to nirvana and the label feeding frenzy, I won the early 90's grunge lottery) but those days are history. In order for young bands to survive nowadays, they need to get paid for their efforts. Touring costs money. Recording costs money.

It feels like the digital landscape has widened peoples appreciation of new music. It's placed alternative forms of music in front of those who may not have been exposed otherwise.
It feels like people are more excited about music than they have been in a long time.

Nut for f**k sake... pay the man for his song and dance. Otherwise the only people who can afford to record quality music are the cookie cutter boy bands with their corporate sponsors and media machines. (Dick In Box Excluded, of course).


Keenan no sólo hace buena música, también tiene argumentos sobre el tema. Una última pregunta sobre el tema. ¿Realmente funcionó la estrategia de In Rainbows? Y si asi fue, ¿quién asegura que les vuelva a funcionar? ¿o a alguien más?

EDIT: Mil gracias si lo leíste completamente.

1 comment:

Akasha De Bathory said...

Hay muchas cosas que analizar en el tema... es muy complicado dividir, organizar y comprender en la música el arte separado de la industria cultural. la tecnología sobrepasa la teoría anlítica al respecto. El internet es un experimento y un arma de dos filos, que por desgracia no podemos juzgar hasta estar fuera de esta línea temporal. de cualquier forma un cambio se avecina y espremos estar ahí para vivirlo.

[Sí, quiero escuichar Adore... no importa que no venga D'Arcy... aunque, nada será lo mismo sin ella]